La Encuesta de salud digital y sector farmacéutico 2021 de Accenture revela cómo está cambiando la experiencia en la atención médica.
Los servicios de atención sanitaria y farmacéutica han de evolucionar al ritmo que lo hacen las nuevas necesidades de los pacientes. Ya no es suficiente con atender sus problemas inmediatos. Ahora, las personas buscan respuestas más completas que les ofrezcan eficacia, seguridad y mejores resultados. Lo cierto es que algunos actores ya han tomado nota de este cambio de perspectiva. Las restricciones impuestas a causa de la pandemia aceleraron el proceso y el sector adoptó, prácticamente de la noche a la mañana, la tecnología digital para, por ejemplo, permitir solicitar citas virtuales adaptándose a la situación. De hecho, nuestra investigación muestra que España ya se encuentra a la vanguardia en el uso de tecnologías digitales en este sentido.
Sin embargo, lo digital por sí solo no puede definir la experiencia sanitaria del futuro. Los pacientes siguen valorando la eficiencia y la privacidad de los datos, así como el apoyo emocional y las explicaciones claras de sus proveedores de servicios de salud. Aspectos que la tecnología no puede cubrir. Ante esta situación, la Encuesta de salud digital y sector farmacéutico 2021 de Accenture pretende comprender las actitudes de las personas hacia el sistema sanitario español y de otros países en lo que respecta al acceso, la adopción de tecnología, la experiencia de servicio y la confianza. Estos son algunos de nuestros hallazgos más destacados.
España, uno de los países más digitales de Europa
El uso de las tecnologías digitales en materia de salud es muy popular en España, especialmente en comparación con otros países europeos. Según la encuesta, tan solo un 25% de los españoles no utilizó ninguna tecnología digital para gestionar su salud en el último año, mientras que ese porcentaje asciende al 36% en el resto del mundo. Las funcionalidades más empleadas en nuestro país fueron las consultas virtuales con médicos, las apps de salud y las historias clínicas electrónicas. Lo llamativo de nuestro país es que incluso aquellas personas que no han probado los servicios sanitarios digitalizados, como las citas virtuales o la gestión de citas, están abiertas a probarlos. Este entusiasmo resulta fundamental para el futuro de la atención sanitaria, que debería aprovechar las tecnologías para aumentar la eficiencia y mejorar los resultados de salud. Para más información consulte la Fuente: Accenture.